
El mal de Parkinson es una enfermedad que ha eludido los esfuerzos de la comunidad médica en casi todas las formas posibles; sin causas objetivadas, ni tratamientos eficaces, los pacientes deben lidiar con medicamentos que solo pueden ayudar a controlar paliativamente sus síntomas, esperando casi inevitablemente que la enfermedad avance.
Aunque la medicina natural tiene propuestas inocuas y seguras, aliadas con un estilo de vida saludable, tales como la nutrición antiinflamatoria o la neuroprotección con plantas y nutrientes, la medicina farmacológica no reconoce una estrategia eficaz y los médicos apegados al sistema sanitario impuesto descartan muchos recursos que hacen la diferencia.
Una luz de esperanza
Sin embargo, recientemente han surgido esperanzas que parecen indicar vías concretas de protección de las células nerviosas del cerebro contra el mal de Parkinson recurriendo a una sustancia natural: semillas de sésamo.
Incluso, de acuerdo a los investigadores japoneses que llevaron adelante el estudio, las semillas de sésamo podrían ser útiles en el tratamiento coadyuvante de esta patología invalidante.
En la enfermedad de Parkinson hay dos condiciones presentes que contribuyen a crear daño en las células nerviosas y generar un deterioro en la función motora.
Por un lado, tenemos el estrés oxidativo; las neuronas son especialmente sensibles al impacto de los radicales libres; el sistema nervioso consume una gran cantidad de oxígeno y si el organismo tiene un déficit de factores antioxidantes, esto provoca presión extrema sobre las células del cerebro impulsando un envejecimiento precoz, procesos inflamatorios crónicos fuera de control y la muerte de las neuronas. Esto desencadena el mal de Parkinson y otras enfermedades degenerativas.
Por el otro, los pacientes con la enfermedad presentan déficit de dopamina; cuando se padece el mal de Parkinson, los niveles de dopamina se vuelven insuficientes; la dopamina es un neurotransmisor cuyos efectos están relacionados con el bienestar, la regulación del estado de ánimo y la eficiencia de la función motora.
La buena noticia es que, al parecer, de acuerdo a esta investigación realizada en la Universidad de Osaka, las semillas de sésamo pueden ser de mucha utilidad en ambos casos y contribuir en la prevención y el tratamiento del mal de Parkinson.
Sesaminol, un aliado de la integridad neurológica
El sesaminol es un fitoquímico natural presente en las cáscaras de las semillas de sésamo; su utilidad destacada es la capacidad de proteger las neuronas motoras de la oxidación y ayudar a mantener niveles elevados de dopamina.
El sesaminol es un potente antioxidante capaz de regular la producción de especies reactivas de oxígeno y los antioxidantes para detener el daño neuronal. Por un lado, favorece el movimiento de Nrf2, una proteína que se activa en respuesta a la oxidación; por el otro, disminuye la producción de especies reactivas de oxígeno intracelular, reduciendo la oxidación que daña las neuronas motoras en el marco de un metabolismo normal. Es decir, promueve los mismos resultados, pero con una mayor eficiencia.
Por otra parte, después de alimentar ratones con una dieta que contenía sesaminol durante 36 días, los investigadores observaron un aumento significativo en sus niveles de dopamina, lo que determinó un mejor rendimiento motor, incluyendo función intestinal, en las pruebas de laboratorio.
Benefíciate y evita el deterioro
Los resultados fueron muy buenos y los investigadores planean pasar rápidamente a los ensayos clínicos para desarrollar un fármaco para el mal de Parkinson a partir de una fuente alimentaria sostenible.
¡Tú no tienes que esperar! Desde hoy mismo puedes incorporar semillas de sésamo para adquirir tu dosis de sesaminol; por supuesto, con el tiempo aprenderemos más sobre la cantidad óptima y las mejores formas de consumirlo, pero podemos dar pasos seguros y prudentes si incorporamos una o dos cucharadas de postre de semillas de sésamo al día espolvoreándolo en ensaladas, rellenos o todo lo que tu creatividad disponga.
Una de mis opciones favoritas es un batido con sabor a chocolate. Los ingredientes para dos vasos son: 1 cucharada de semillas de sésamo integral, una cucharada de cacao amargo, una banana y un vaso y medio de agua. Procesamos todos los ingredientes, primero con poca agua para que adquiera cremosidad, y luego agregamos el resto. ¡Y listo! Beber frio, tibio o caliente, como más te guste.
Procura compartir la segunda porción o guardarla para más tarde; de esta manera mantendrás bajo el consumo de calorías y carbohidratos, mientras que sumas nutrientes de calidad para la eficiencia de tu metabolismo.
Para saber un poco más del sésamo y ampliar nuestras opciones de consumo, te dejo el siguiente video de Pablo Martín:
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Si deseas ver o compartir la versión podcast en vídeo: Semillas de sésamo contra el mal de Parkinson
Pablo de la Iglesia
Bibliografía
Hung, M.L. et al. El estrés oxidativo en las enfermedades neurológicas: ¿causa o consecuencia? (2014) Neurología.
Kaji, Haruka et al. Sesaminol prevents Parkinson’s disease by activating the Nrf2-ARE signaling pathway. (2020) Helivon.
Melore, Chris. Parkinson’s surprise: Scientists discover sesame seed chemical can protect against disease. (2021) Study Finds.
Schmedthorst, adria. The seed that offers protection against parkinson’s disease. Easy Healthy Options.